Italia abre sus puertas a los trabajadores extranjeros altamente cualificados, quienes obtendrán la tarjeta azul ingresaran en Italia mucho más rápido, gracias a una simple comunicación de los empleadores.
La novedad, con todos los detalles del procedimiento, se ilustra en una circular conjunta difundida hace unos días por los Ministerios de Interior y de Trabajo.
Esta medida va dirigida a una amplia gama de trabajadores, como: altos directivos, informáticos, profesores, ingenieros, agrónomos, programadores, asistentes sociales, agentes de viajes o analistas de laboratorio, entre otros. Ya en la actualidad, estos trabajadores pueden ser llamados en Italia sin límites numéricos y sin tener que esperar a que el decreto flujos emitidos por el gobierno.
A partir de ahora, el proceso se vuelve aún más simple. Las empresas que firmarán un protocolo de entendimiento con los Ministerios de Interior y de Trabajo, podrán hacer llegar estos trabajadores mediante el envío de una simple comunicación a través de internet a la Oficina Única para la Inmigración, sin tener que esperar una autorización.
Después de la emisión de la declaración, el empleado puede ir al Consulado italiano en su país y obtener una autorización de ingreso en Italia. Una vez aquí, el trabajador firmará el contrato de residencia y podrá requerir la tarjeta azul de la Unión Europea o súper permiso, que le permitirá recibir tratamiento igual a la de los ciudadanos europeos.
La tarjeta azul de la Unión Europea es un permiso especial de residencia, reservada a los trabajadores extranjeros que han completado un curso en el país de origen de por lo menos tres años de educación superior y poseen uno de los títulos incluidos en los niveles 1, 2 y 3 de la clasificación ISTAT de profesiones como se detalla a continuación.
1° Legisladores, Empresarios y Altos Dirigentes
2° Profesiones Intelectuales, Científicos de especialización elevada
3° Profesiones técnicas
En el caso de las profesiones reguladas, aquellas que se suscribe a un registro, además deben cumplir los requisitos previstos de la ley italiana.