El ultimo informe anual del Censis ( Centro de Estudios de las Inversiones Sociales ), pinta un panorama bastante desolador en cuanto a las perspectivas futuras para los inmigrantes en territorio Italiano.
Estos son algunos de los puntos mas importantes del informe:
Una importante reducción (-40%), en las asunciones de personal extranjero en las empresas, aumento de los desalojos por falta de pago y una disminución de la compra de viviendas por parte de inmigrantes.
Así mismo, los envíos de dinero, por parte de los inmigrantes hacia sus países de orígenes, se ha reducido.
Si bien la cantidad de inmigrantes regulares ha aumentado en el ultimo año de casi 500 mil personas, la crisis y sobre todo el aumento de la desocupación, hace que la integración entre italianos y extranjeros se vuelva cada vez mas difícil.
Aumentan los fenómenos de intolerancia, como así también las denuncias por comportamientos discriminatorios dentro y fuera del ambiente de trabajo.
Las mujeres extranjeras, tienen una fecundidad que duplica a la de las italianas (1,3 hijos por familia), como consecuencia, los extranjeros nacidos y residentes en Italia son casi medio millón y en las escuelas la cantidad de alumnos de origen extranjero aumento de un 140%.
Via Repubblica
