Lisboa es famosa por ser una de las capitales con más encanto de Europa, gracias a su especial atmósfera, viva y melancólica al mismo tiempo, y las innumerables atracciones de sus barrios históricos.
Desde las calles de Alfama, a los pies del Castillo de San Jorge, hasta las emblemáticas callejuelas del Barrio Alto, con sus tiendas y locales, pasando por la atmósfera bohemia del Chiado y la sofisticada elegancia de la Baixa Pombalina. Pero Lisboa significa también océano y aunque la ciudad como tal no cuenta con playas, por encontrarse en el estuario del río Tajo, en la región metropolitana hay varias opciones para quienes quieren pasar un día en la playa.
La playa más cercana a la ciudad de Lisboa es la playa de Santo Amaro de Oeiras, ubicada el la freguesia de Oeiras e São Julião da Barra, muy cerca de la desembocadura del río Tajo. Es cómoda, por su ubicación cerca de la ciudad y por ser de fácil acceso. Se puede llegar en tren, con la línea de cercanías de Cascais, y la estación de tren está a pocos minutos de la playa. Sin embargo, las mejores playas se encuentran alejándose del estuario del río.
La enorme playa de Carcavelos, considerada como la playa popular por excelencia de Lisboa, es una playa amplia y de arena fina.
Si estamos alojados en apartamentos en Lisboa, desde el centro de la ciudad se puede llegar fácilmente, utilizando el tren de cercanías: el viaje dura aproximadamente 30 minutos. Se trata de una playa muy frecuentada y animada.
Alejándose más de la capital, se llega a la Costa do Estoril, que se extiende desde Carcavelos hasta Guincho y es un destino popular para vacaciones de sol y playa, gracias a sus bellas playas, sus infraestructuras turísticas de calidad y su animada vida nocturna. Además, el pueblo de Cascais cuenta con un interesante patrimonio histórico y en la zona se encuentra el Parque Natural Sintra-Cascais, que se extiende desde Sintra hasta la Playa de Guincho, que con es una de las favoritas de los aficionados al surf, y Cabo de Roca, con espectaculares acantilados.
Para disfrutar de las playas preferidas de los lisboetas, hay que ir a unos 15 kilómetros de Lisboa, a Costa de Caparica. A diferencia de las playas mencionadas anteriormente, que están ubicadas al oeste de Lisboa, desde la margen septentrional del río, las de la Costa de Caparica se encuentran al sur del Tajo: un conjunto de playas que se extienden por 30 kilómetros, conformando el mayor arenal de Europa, a solo media hora de la ciudad capital.
